Aviso para afectados por la DANA: cuenta con nosotros

Si tu coche ha sufrido daños por las inundaciones del temporal, nosotros nos encargamos de la reclamación al Consorcio de Compensación de Seguros por ti. Llámanos al 912 755 450 y te facilitamos la apertura del parte y el envío de documentación al Consorcio para que seas indemnizado lo antes posible.

Aviso para afectados por la DANA: cuenta con nosotros

Si tu coche ha sufrido daños por las inundaciones del temporal, nosotros nos encargamos de la reclamación al Consorcio de Compensación de Seguros por ti. Llámanos al 912 755 450 y te facilitamos la apertura del parte y el envío de documentación al Consorcio para que seas indemnizado lo antes posible.

¿Qué es un seguro? Todos sabemos lo que es un seguro y por lo tanto no es necesario pertenecer a la Real Academia de la Lengua para dar una definición improvisada. En Qualitas Auto apostamos por algo así: Un seguro es un contrato a dos bandas mediante el cual una parte asegura un bien a cambio de una cantidad económica o prima y la otra parte se compromete a restituir ese bien en caso de que algo le ocurra.

Parece que los seguros han estado con nosotros desde siempre ¿verdad? Pues tal vez le resulte curioso saber que hubo un tiempo muy lejano en el que estas cómodas formas de garantizar nuestros objetos más preciados no existían. Por suerte en Qualitas Auto hoy tenemos todas las modalidades de seguro que necesite para cubrir su coche. En esta entrada queremos adentrarnos en el pasado y conocer cuáles fueron los orígenes del seguro además de las curiosidades que los rodeaban.

1. Los chinos no se fiaban de los ríos (3.000 a.C)

La historia de los seguros es casi tan antigua como la historia del ser humano.  Para conocer uno de los primeros intentos de seguro de la historia hemos de remontarnos a 5.000 años. En los alrededores del año 3.000 a.C los chinos, grandes inventores (la pólvora, los fideos, el té), estaban hartos de perder parte de sus mercancías en los muchos y peligrosos ríos que atravesaban su país. Por eso los mercaderes chinos de hace 5.000 años establecieron un sistema cambiante mediante el cual cada barco fluvial se distribuía la carga de forma diferente a la anterior vez. De esta forma, alternando el transporte de la mercancía se “aseguraban” que si alguna embarcación sufría un percance no se perdiera el cargamento entero.

2. Seguro de momia para los egipcios (2.225 a.C)

Pese a que los inicios históricos del Antiguo Egipto se remontan al año 5.500 a.C, no fue hasta los albores del Primer Periodo Intermedio allá por el 2.225 a.C cuando se comenzó a extender una curiosa práctica pionera. Consistía en crear asociaciones en las que todo aquel que se uniera pagaba una cuota para que en el momento de su muerte, el resto de miembros pagara sus caros ritos funerarios, que incluían ceremonias para garantizar el tránsito de este mundo al más allá. En esta costumbre encontramos un serio paralelismo con un actual seguro de decesos mediante el cual podemos sufragar los gastos de funeral, entierro, etc.

Una momia egipcia ¿Habría pagado su cuota del seguro? Foto: Zubro (Creative Commons)
Una momia egipcia ¿Habría pagado su cuota del seguro? Foto: Zubro (Creative Commons)

3. Los babilonios y su código (1.760 a.C)

Otra de las primeras sombras de algo que podríamos llamar los “protoseguros” la encontramos en la civilización babilónica. Casi 4.000 años atrás, concretamente en el año 1.760 a.C los habitantes de Babilonia se regían por uno de los primeros conjuntos de leyes de los que se tiene constancia de toda la humanidad: Se trata del famoso código de Hammurabi, Dictado por el rey Hammurabi (lógicamente). En él se recogen una serie de medidas legales bastante extremas y que son curiosidades para nuestros días. Por ejemplo si una casa se derrumba acabando con la vida de alguien, entonces habría que ejecutar al arquitecto. Sin embargo también encontramos algunas normas que podríamos llamar seguros, como un pago cooperativo en caso de pérdidas en las caravanas en el desierto o el préstamo a comerciantes para pagar la garantía si un barco se hundía en labores comerciales (además luego había que aportar entre todos los comerciantes para construir un nuevo barco creando una de las primeras formas de mutualidad).

Detalle del Código de Hammurabi, en el que se contemplaban algunas compensaciones a modo de seguro.
Detalle del Código de Hammurabi, en el que se contemplaban algunas compensaciones a modo de seguro. Foto: Fritz-Milkau (Wikimedia Commons).

4. Fenicios, los primeros corredores de seguros (1.000 a.C)

Si hablamos de los fenicios es posible que nos encontremos ante la primera forma oficial de seguros. Se tiene constancia de pruebas que podrían atestiguar que los fenicios son los mejoradores de los seguros. El origen de que tengamos asegurados nuestras casas y coches se debe a los fenicios, quienes crearon las primeras empresas de seguros también basándose en el comercio marítimo (cosa que no es difícil de entender puesto que el pueblo fenicio destacó por ser una civilización eminentemente comerciante). Por lo tanto, estas primeras casas de seguro, auténticas corredurías ofrecían la posibilidad de que si un barco mercante no llegaba a puerto, su valor económico era devuelto en función de la mercancía transportada. Por supuesto, si algún mercader quería tener sus espaldas bien cubiertas ante esta posibilidad, tenía que realizar un pago antes de que el navío dejara el puerto. El concepto de seguro a todo riesgo estaba inventado.

5. Los persas aseguraban a sus súbditos (500 a.C)

Tal vez una de las primeras formas de nuestros modernos seguros de vida la podamos encontrar en los reyes de la antigua Persia, más concretamente en los monarcas aqueménidas, quienes tenían la costumbre de asegurar a sus súbditos y esclavos más preciados mediante constancia en el registro notarial de sus suntuosos palacios. Curioso, ¿verdad?

6. De Roma a la Baja Edad Media (S. V – S. IX)

El declive del Imperio Romano de Occidente (con su caída en el año 476 d.C) trajo consigo nuevas formas de organización en las ciudades (unas ciudades, las de la Antigua Roma, en la que ya había «coches»). Una de ellas fueron los collegia romanos, que eran agrupaciones de profesionales que defendían sus intereses entre ellos (de una forma un tanto sectaria y violenta que podía recordar a la mafia italiana). Una de las normas de estos collegia era la existencia de una cuota mensual que había que pagar si se quería estar “asegurado” contra cualquier imprevisto, sufragar gastos de funerales o defenderse de un enemigo. El sistema de los collegia evolucionó hasta la Baja Edad Media Europea (A partir del S. IX), en el que las llamadas guildas tomaron protagonismo. Las guildas eran también una forma de organización gremial que -mediante el pago de cuotas- permitía el acceso a una hermandad de comerciantes del mismo sector. De esta forma se creaba un proteccionismo mutuo que cubría pérdidas a modo de seguro en caso de incendio, muerte o enfermedad.

7. El gran contrato de la Santa Bárbara (S. XIV)

La primera póliza de la que se tiene constancia es del año 1.347. Una vez más debemos dar las gracias a los seguros marítimos. El primer contrato escrito de seguro se redactó y firmó en Génova, y aseguraba contra posibles accidentes, naufragios o asaltos piratas a un navío mercante bautizado con el nombre de Santa Bárbara, que iba de Génova a Mallorca. No se trata de un viaje tan largo, ¿verdad? Además, una cobertura de la póliza también cubría en caso de que las mercancías llegaran tarde al puerto.

8. El gran incendio con el que comenzó todo (S. XVII)

Con el que comenzaron los seguros a gran escala, nos referimos. En el año 1.666 se originó en Londres un incendio de proporciones gigantescas que duró tres días de septiembre y que arrasó con 13.200 casas y 90 iglesias, lo que suponía casi un tercio de la capital inglesa. Un año después se crearon unas compañías de seguros de incendio que por una módica cuota protegían al asegurado en caso de que este desastre se volviese a producir. Este es también el origen de las placas que vemos en muchas fachadas de casas y que advierten que dicho inmueble se encuentra protegido con un seguro antiincendios.

Incendio-Londres-1666
Así se veía Londres desde Southwark durante el gran incendio de 1666. Foto: Robert Chambers’ Book of Days (Wikimedia Commons).

9. El primer seguro de coche (1898)

Pero no el último. ¿Dónde se hizo el primer seguro de coche? Como no, habrá que mirar a Estados Unidos para ver dónde se firmó el primer seguro de coche. El primer seguro de coche de la historia se rubricó el 1 de febrero de 1898 mediante la compañía Travellers Insurance. Como curiosidades, decir que se utilizó como modelo a la hora de redactar la póliza un contrato de seguro para carruaje de caballos debido a que ni siquiera se había planteado que a ese moderno invento de 4 ruedas hubiera que hacerle un seguro a su medida. Este primer seguro de automóvil cubría los gastos de responsabilidad civil solamente en el caso de que el vehículo chocara contra un jinete o contra un carro tirado por caballos. A medida que el coche se fue haciendo más habitual en las carreteras, lógicamente estos seguros fueron en aumento, y no digamos cuando los gobiernos de todo el mundo convirtieron la modalidad de seguro a terceros como algo obligatorio.

Esos son algunos de los hitos más importantes de la historia del seguro. Pero hay más ¿Conoce usted algún otro momento clave para entender lo que es el seguro de hoy en día? De cualquier modo parece que hay puntos comunes en los orígenes del seguro, y esos  momentos parecen siempre estar ligados al mar. El seguro marítimo en caso de pérdidas de embarcaciones con mercancías pasa por casi todas las etapas históricas como el precursor de nuestros seguros. Una modalidad parecida que le ofrece Qualitas Auto es la de nuestro seguro de asistencia en viaje. Bueno, con algunas diferencias, como la más importante, que nosotros no aseguramos barcos (todavía) y sí coches. Conocer la historia es algo tan importante como que ustedes hayan disfrutado con esta entrada de blog. Así esperamos que haya sido. Un saludo.

Fuentes: Las mil respuestas, La respuesta está en la historia.