Un depósito de combustible infinito

No se trata de magia. Un grupo de científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts han descubierto la manera de convertir el carbono en isobutanol, un alcohol que podría ser mezclado con la gasolina para obtener más combustible o incluso sustituirla. Pero lo más curioso es la vía por la que han descubierto que esta conversión es factible. En Qualitas Auto nos preocupamos por la sostenibilidad del planeta y por buscar alternativas al combustible actual, que a tan elevado precio se ha puesto.

Estos científicos comenzaron a indagar con una bacteria llamada Ralstonia Eutropha, un organismo que cuando encuentra pocas fuentes de alimentación se nutre de carbono, y tras digerirlo ofrece un tipo de polímero sintetizado. Hasta ahora otros científicos habían llegado a este paso, pero tras esto tenían que destruir las bacterias para extraer los subproductos de biocombustible que querían usar. El gran avance de los científicos de Massachusetts reside en que, alterando algunos genes de estas bacterias, consiguieron que las bacterias crearan isobutanol en vez de polímero, un alcohol que puede ser utilizado directamente, sin necesidad de refinado.

Estos mismos científicos están trabajando para dar un paso más. Por ahora estos microrganismos reciben el carbono de la fructosa, pero lo que quieren es que puedan nutrirse del dióxido de carbono procedente de las emisiones de los coches y de las industrias. Ahora están centrados en desarrollar esta tecnología a lo grande, y de conseguirlo, el combustible de los coches podría llegar a ser ilimitado, porque estaría renovándose constantemente. Incluso lograrían acabar con la necesidad de utilizar cultivos para producir biocombustibles, y así finalizaría el enfrentamiento con los agricultores que reclaman ese suelo para la alimentación.

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Vía | Coches.com